Edición Abreviada 2023
Corea del Sur tiene una elevada densidad poblacional, por lo que la tierra es muy valiosa. Debido a ello, se han emprendido numerosos esfuerzos, a lo largo de los años, para “reclamar” la tierra al mar y convertir grandes áreas marinas poco profundas en tierras agrícolas y sitios de construcción. Se colocan diques y terraplenes de protección frente a la costa para evitar la erosión marina y permitir que se depositen sedimentos en los estuarios a lo largo del litoral. La costa suroeste, conformada por una gran cantidad de rías, con un entorno marino poco profundo es, en especial, favorable para los proyectos de recuperación de tierras debido a sus extensas planicies y débiles mareas.
La recuperación de tierras se llevó a cabo a lo largo de la historia de Corea con la intención de obtener granos y provisiones militares en las dinastías Goryeo y Joseon en tanto que, durante la colonización japonesa, se utilizó para aumentar la producción de arroz en su propio beneficio. Tras la liberación del dominio japonés, se plantearon proyectos de recuperación de tierras a pequeña escala para mejorar el suministro de alimentos y acabar con la hambruna. Posterior a la década de 1970, se implementaron más proyectos para el desarrollo agrícola integral y, después de 1990, se impulsaron planes de desarrollo polivalente.
El Proyecto de Reclamación de Saemangeum para recuperar tierras es el más grande de Corea y del mundo, el cual comenzó en 1991 y finalizó en 2006. La longitud total del terraplén es de 33.9 kilómetros. A partir del proyecto, se crearon 28 300 hectáreas adicionales de tierra y 11 800 hectáreas de lagos de agua dulce. Las imágenes de la siguiente página muestran la transformación del área como resultado del proyecto entre 1990 y 2020. Los planes actuales se centran en el desarrollo de seis tipos de uso de suelo: industrial/investigación, cooperación internacional, turismo/ocio, agrícola, urbano y naturaleza/ecosistema.
El proyecto de Saemangeum se espera que contribuya a la economía local y nacional mediante la creación de tierras adicionales, como un rico espacio agrícola, el aseguramiento de los recursos hídricos y el desarrollo de un distrito turístico. No obstante, han surgido algunos problemas durante el proceso del proyecto, incluido el daño a las llanuras de marea y la contaminación del agua. La restauración de los ecosistemas costeros es una tarea fundamental para mantener la integridad ecológica de las costas y promover una mayor sostenibilidad económica. |